Este modelo de cortinas, conocido como paneles japoneses, se distingue por su diseño sin frunce, creando paños lisos de distintos anchos que se adaptan a las dimensiones específicas del espacio a vestir. Estas medidas personalizadas se determinan tras una cuidadosa toma de medidas en el entorno. Al abrir los paneles japoneses, los paños se apilan de manera ordenada, creando un aspecto limpio y minimalista.

Para garantizar un desplazamiento suave y preciso, los paneles japoneses sin frunce se deslizan sobre rieles multivías que brindan flexibilidad y opciones de apertura. Cada panel cuenta con su propio bastón individual para facilitar el accionamiento y el control manual de los paneles japoneses.

En cuanto a los tejidos utilizados, se pueden seleccionar diferentes materiales en función de las preferencias estéticas y las necesidades funcionales. Desde tejidos translúcidos que permiten el paso de la luz natural, creando una atmósfera suave y difusa, hasta opciones más opacas que brindan privacidad y control de la iluminación.

Este estilo de cortinas sin frunce es ideal para aquellos que buscan un aspecto moderno y elegante, con líneas limpias y sin adornos. Su versatilidad permite adaptarse a una variedad de estilos decorativos, desde ambientes minimalistas y contemporáneos hasta espacios más tradicionales.

En resumen, los paneles japoneses sin frunce se caracterizan por su diseño liso y sin pliegues, ofreciendo una estética sofisticada y ordenada. Su adaptabilidad en cuanto a medidas, sistemas de rieles y opciones de tejidos los convierte en una elección versátil y funcional para vestir ventanas en diversos entornos.